Me llamo Juan de Dios Cáceres, antiguo estudiante de Traducción en la UGR. Me dieron una beca para estudiar un año académico en la BLCU de Beijing. Al principio, fue difícil acostumbrarme al ritmo y al tipo de vida tan diferente que llevan aquí. Esto se parecía a mi primer Erasmus, pero con el tiempo he descubierto que es mucho más.
“China is different” y se nota en todos los detalles, en el ritmo acelerado de las clases, en los horarios, en el trato con la gente, en la forma de negociar con los demás, en la forma de soportar los problemas y resolverlos, en la dificultad que ahora sé de primera mano que entraña esta lengua y esta cultura, pero también en su gran riqueza.
Veo las cosas mucho más claras que cuando cursaba la carrera en Granada, he echado abajo muchos de los estereotipos que me habían enseñado y afianzado algunos que no me creía del todo. He descubierto cuánto se parecen nuestras culturas, dónde podré encontrar territorio común en la comunicación con la gente de aquí y también sabré a partir de ahora cómo tratar de veras con ellos porque también he aprendido las diferencias culturales.
Esta beca me ha dado la oportunidad no sólo de descubrir China, sino también la de viajar por el sureste asiático y conocer otros países y sus costumbres. Utilizando la típica frase, sí, puedo decir que toda esta experiencia me ha cambiado. Y todavía me falta un cuatrimestre.
Cuesta trabajo superar el famoso “pekinazo”, cuesta trabajo sacar fuerza de voluntad para continuar con una lengua tan difícil. Pero si después de seis meses aquí puedo hablar durante el doble de tiempo que antes hablaba y leer textos al doble de velocidad que antes leía, quizás quiere decir que uno mejora. Y tengo claro que si después de seis meses he aprendido más chino que durante dos años en España, quizás es porque este viaje ha merecido la pena.
Ánimo a todos los que sueñan con esto, de verdad que se puede conseguir, con un poco de suerte y mucha paciencia y trabajo.
Ahora me voy a tomar un café y echar una horita de conversación chino-español con mi amiga Zhang Tianqi. ¡Hasta luego!